- En la capital sinaloense, contrastes en afición de Dorados
Variados estados de ánimo se viven en la capital sinaloense debido a la comprometida situación que atraviesa Dorados y su pelea por permanecer en Primera División: por un lado, la ilusión, por otro, desánimo y desahucio al saberse al borde del abismo.
En el aeropuerto de Culiacán, los taxistas no ven con buena cara la posibilidad de la salvación. Saben y aceptan que el equipo del Profe Cruz va que vuela de regreso a la Liga de Ascenso.
"Ya estamos resignados. Está muy difícil que se salven", dicen los trabajadores del volante, quienes apoyan, pero no al cien por ciento. "Yo le voy más a las Chivas", dice uno que apela a sus raíces jaliscienses, y por ello el Gran Pez no le motiva tanto como el equipo de Almeyda.
Sin embargo, a las puertas del estacionamiento para los jugadores del Estadio Banorte, una cartulina en color verde fluorescente lleva un mensaje de apoyo y motivación. Es sencillo, pero hecho con el corazón.
"¡Vamos Dorados!, #ContigoSiempre", se lee en el mensaje. No falta el optimista que quiere cambiar la perspectiva, y soñar con la salvación.