Editorial Mediotiempo
París, Francia
Este lunes, Luka Modric conquistó el Balón de Oro 2018 al mejor futbolista del mundo. Si bien no deja de sorprender que ni Lionel Messi ni Cristiano Ronaldo se quedaran con la condecoración, quien ya sabía que el momento del croata llegaría es Zinedine Zidane, quien se lo dijo ¡en enero del 2016!
En entrevista para France Football, publicación que entrega el Ballon d'Or, Modric recordó que cuando Zizou se convirtió en técnico del Real Madrid le llamó a su oficina y "predijo" que sería premiado como el mejor del planeta en un futuro cercano.
"Hay una cosa que no olvidaré nunca. Cuando Zidane llegó a ser entrenador del Madrid en enero de 2016 me llamó después de un entrenamiento a su oficina. Me explicó cómo me veía como jugador y también qué esperaba de mí, me dijo que era un futbolista muy importante y, sobre todo, que me veía como un jugador que podía ganar el Balón de Oro", platicó el croata.
"Cuando alguien como Zidane, con su personalidad y su historial, te dice eso, te sube la moral. Le admiraba y respetaba enormemente como jugador, me veía como alguien a quien yo me parecía, tranquilo y un poco tímido. Esperaba de mí que me expresara más sobre el campo, que me abriera. Necesitaba de mí que fuera una pieza clave en el equipo, en una época en la que hemos jugado verdaderamente bien al futbol. Esas palabras de Zidane me ayudaron a ir más allá en mi juego".
El galardón entregado al 10 del Real Madrid y la Selección de Croacia este día en París terminó con una hegemonía de una década ejercida por Cristiano y Messi, ganador cada uno en cinco oportunidades en ese lapso.
En entrevista para France Football, publicación que entrega el Ballon d'Or, Modric recordó que cuando Zizou se convirtió en técnico del Real Madrid le llamó a su oficina y "predijo" que sería premiado como el mejor del planeta en un futuro cercano.
"Hay una cosa que no olvidaré nunca. Cuando Zidane llegó a ser entrenador del Madrid en enero de 2016 me llamó después de un entrenamiento a su oficina. Me explicó cómo me veía como jugador y también qué esperaba de mí, me dijo que era un futbolista muy importante y, sobre todo, que me veía como un jugador que podía ganar el Balón de Oro", platicó el croata.
"Cuando alguien como Zidane, con su personalidad y su historial, te dice eso, te sube la moral. Le admiraba y respetaba enormemente como jugador, me veía como alguien a quien yo me parecía, tranquilo y un poco tímido. Esperaba de mí que me expresara más sobre el campo, que me abriera. Necesitaba de mí que fuera una pieza clave en el equipo, en una época en la que hemos jugado verdaderamente bien al futbol. Esas palabras de Zidane me ayudaron a ir más allá en mi juego".
El galardón entregado al 10 del Real Madrid y la Selección de Croacia este día en París terminó con una hegemonía de una década ejercida por Cristiano y Messi, ganador cada uno en cinco oportunidades en ese lapso.