- Murray remontó dos sets en contra por sexta vez en su carrera
El tenista escocés Andy Murray estuvo a punto de protagonizar la gran decepción de la jornada en el US Open, ya que el holandés Robin Haase lo tuvo contra las cuerdas al imponerse en los dos primeros sets, pero el cuarto cabeza de serie se rehizo y ganó finalmente por 6-7(5), 2-6, 6-2, 6-0 y 6-4. Haase no salió nada intimidado a la pista Louis Armstrong, no en vano había ganado a Murray en el único precedente entre ambos, y dispuso de su servicio con 5-4 para ganar el primer set, pero Murray logró el 'break' y llevó el partido a la muerte súbita, en la que el holandés vio premiado su mejor juego. Murray se fue del partido en el segundo set, con 16 errores no forzados por tres de su rival. Haase se apuntó el segundo set por 6-2 y comenzó a soñar con la hombrada. Sin embargo, la reacción de Murray, que llegaba al torneo tras ganar el Masters 1000 de Cincinnati, fue furibunda ante un rival que solicitó en varias ocasiones la presencia del fisioterapeuta. En apenas una hora, el escocés había enmendado la plana al ganar los dos siguientes parciales con mucha facilidad. Parecía que el jugador británico había puesto la directa cuando arrancó en la manga definitiva con un 4-0, pero el holandés no había dicho la última palabra y le devolvió con la misma moneda, encadenando cuatro juegos consecutivos y empatando el partido. La mayor experiencia de Murray en este tipo de situaciones fue fundamental para la resolución del partido, ya que quebró el servicio de Haase en el noveno juego y supo aguantar con el suyo, tras levantar un par de puntos de 'break' del holandés para cerrar el partido tras 3 horas y 23 minutos de juego.
