Durante poco más de cuatro años, Javier Hernández aplicó una autorregulación con la prensa: no hablar de su desempeño en club mientras estuviera concentrado con la Selección Mexicana.
“Ahorita estoy en Selección, de mi club no hablo”, fueron las palabras que repitió y repitió Hernández para capotear a los reporteros mexicanos cuando tenían la oportunidad de hablar con él aprovechando su estancia en el Tricolor.
De hecho, nunca “dio la nota” con declaraciones. Normalmente se manejaba con respuestas básicas, “cajoneras”, sin comprometerse. Quizá no le hacía falta, pasó muy buenos momentos en el Manchester United, hasta su última Temporada ahí donde fue relegado tras la salida del técnico Alex Ferguson. A pesar de ello, se mantuvo en la misma postura. No hablaba de su club mientras tuviera puesta la camiseta nacional.
Jamás se atrevió a decir algo referente a un posible cambio de equipo con todo y que ya no tenía futuro en el Manchester. Entonces vino la llegada al Real Madrid, tremendo golpe mediático que reanimó su imagen entre el público mexicano y que lo colocó otra vez en la vitrina a nivel mundial.
Ese buen ánimo fue desmoronándose con el paso de los meses y los escasos minutos en el campo. Una permanencia casi estática en la banca del Madrid y, por supuesto, sus intereses para componer una carrera en Europa que ha ido en picada, lo motivaron a cambiar de estrategia.
En la concentración del Tricolor, “Chicharito” ahora sí quiere hablar de su situación en el club con el que tiene contrato. Rompió su autorregulación con la prensa mexicana. Y en términos prácticos, decidió utilizar a los medios en el momento que le conviene para mandar mensajes al técnico madridista, Carlo Ancelotti.
“No es fácil estar cuatro meses sentado, no es fácil no tener 90 minutos”, le dijo Hernández a Medio Tiempo tras el partido ante Ecuador en Los Ángeles, California. “Lo único que necesito es ritmo, es continuidad, y bueno, ya el tiempo y Dios dirá dónde me tocará hacer eso”, agregó.
Luego, en una entrevista con Fox Sports, el mismo Hernández que antes evadía temas importantes y se negaba a hablar de su situación en club, reafirmó su nueva forma de expresarse.
“Mi situación es frustrante. Colaboro, ayudo y doy el cien por cien en los entrenamientos, pero en los partidos las oportunidades son mínimas. Estoy en un equipo, pero fuera de lo importante, de los partidos”.
Así, cuando está claro que no va a seguir en el Real Madrid, que tampoco debe volver a Manchester y que a los 26 años de edad necesita ir a otro club para consolidarse como titular en Europa, “Chicharito” maneja sus intereses ante la prensa. Vaya cambio.