Aderezado con polémicas arbitrales, el Atlético de Madrid dio un golpe de autoridad, y con un 2-0 ha dejado moribunda a la Juventus de Cristiano Ronaldo en la ida de los Octavos de Final de la Champions League en el Estadio Wanda Metropolitano.
Fueron dos goles a balón parado y se anuló otro más en situación similar después de que al inicio del partido, la Vecchia Signora parecía tener las mejores jugadas.
Cristiano Ronaldo intentó horadar la puerta del portero Jan Oblak desde el minuto 8 con un disparo de tiro libre que obligó al arquero a estirarse y desviar. Después de eso no pudo volver a darle dirección a un solo tiro.
La primera polémica arbitral llegó a los 28 minutos cuando Diego Costa fue derribado en el área, pero el VAR develó una falta que no era penal tras ser cometida a un metro del rectángulo.
El intento fue del delantero Antoine Griezmann que dio a las manos del arquero Wojciech Szczesny.
Fue tal la lucha por el esférico y la polémica arbitral que sobre el minuto 32, CR7 recibió dos patadas que no fueron consideradas ni faltas pese a que el planchazo fue claro por parte del defensa Juanfran.
En el 50’ el duelo comenzó a pintarse de rojiblanco cuando Diego Costa falló un mano a mano.
La insistencia se reflejó al 52’ cuando el defensa Giorgio Chielini punteó el balón en el área a otra jugada de Griezmann que da en el travesaño.
El vendaval siguió con un gol del artillero Alvaro Morata tras un remate de cabeza al 69’. Sin embargo, tras revisar la jugada con el Videoarbitraje (VAR), el central decidió anular el tanto.
Y tanto fue el cántaro al agua hasta que se desbordó.
Era el minuto 77’ cuando se dio un nuevo tiro de esquina y Juanfran remató picado, el balón quedó en el centro del área y el zaguero José María Giménez remató cruzado para lograr el 1-0.
Luego al 82’ llegó un nuevo centro en jugada de táctica fija, el balón volvió a quedar libre en una segunda jugada y apareció el defensa Diego Godín para el 2-0 definitivo que tiene a la Juventus y a Cristiano Ronaldo contra las cuerdas.
