Hace algunos días, jugadoras "elite" de la Selección Femenil de Futbol de Estados Unidos, de la talla de Carli Lloyd, Hope Solo y Alex Morgan, levantaron la voz con una clara intención: la igualdad de género.
Junto con otras jugadoras, presentaron una denuncia ante la Equal Employment Opportunity Commission (autoridad competente en su país encargada de dirimir controversias relacionadas con discriminación en los lugares de trabajo), en contra de la U.S. Soccer, alegando que aunque realizan la misma actividad que la Selección Varonil de Futbol, no cuentan con los mismos derechos y prerrogativas.
Un ejemplo son los sueldos y remuneraciones, que no llegan a ser ni del 40% de lo que los varones obtienen. Las condiciones en los viajes, aviones, hospedaje, también son menores para las mujeres.
Lo anterior resulta completamente injusto ya que el futbol femenil en Estados Unidos genera mucho más ingresos que el varonil, y si hablamos de resultados deportivos, mientras que la Selección varonil no ha ganado nada, la Selección femenil ha ganado 3 Copas del Mundo y 4 Medallas de Oro Olímpicas.
La equidad de género y la igualdad de oportunidades profesionales son derechos fundamentales. Lo que han hecho hoy estas jugadoras es un ejemplo de valentía y agallas, y debe ser un parteaguas, no solo en elfutbol, no solo en el deporte, no solo en Estados Unidos. Debe ser un ejemplo a seguir para todos y todas a nivel mundial, en todos los ámbitos.
Las mujeres deben tener las mismas oportunidades profesionales y tienen derecho a percibir los mismos salarios que los hombres, si realizan actividades iguales o semejantes.
Es un buen momento para dejar estas ideas retrógradas y luchar juntos como hoy lo hacen estas jugadoras, al igual que muchas otras mujeres en el mundo, para que se terminen estos deleznables actos de discriminación.
Hoy debemos apoyar esta lucha, una lucha por la justicia y la igualdad.
