Para nadie es un secreto que el América es el equipo con el mayor número de adversarios en el país, y cuando se mete a instancias definitivas de Liguilla o está cerca del título, todos los antiamericanistas se unen a favor del equipo que enfrente.
Tal es el caso ahora de Pumas, que además de sus fervientes aficionados que de origen son antiamericanistas, contarán con sus aliados seguidores de otros equipos que no soportan a las Águilas.
Así de sencillo es. Aquellos partidarios de Chivas, Cruz Azul, Puebla, Veracruz, Monterrey, Pachuca, Morelia y un largo etcétera de clubes ya eliminados estarán a favor del cuadro de la UNAM, con ganas de que deje fuera al América.
Hay también quienes desde los medios de comunicación tratan de condicionar a los lectores, radioescuchas o telespectadores para formarse una opinión negativa hacia los árbitros que supuestamente tratarán de ayudar a los de Coapa a llegar al título. De esas leyendas urbanas que millones de personas se creen nada más porque alguien las dice ante un micrófono.
Así ocurrió el sábado pasado cuando en la transmisión del partido León-América, el narrador se la pasó repite y repite que el árbitro estaba muy nervioso y que ojalá no influyera en el resultado. Al final no influyó, pero ya la gente estaba predispuesta que si había un error iba a beneficiar a las Águilas.
Siempre todo lo relacionado con el americanismo se magnifica, a favor y en contra. No hay medias tintas, no hay un punto medio en cuanto a las críticas, o son totalmente a favor o totalmente en contra.
Así que esta semana aquellos cruzazulinos, rojiblancos, regios, hidalguenses, poblanos, veracruzanos y tantos otros aficionados antiamericanistas se unirán a la causa Puma para hacer fuerza y mandar vibras en su afán de ver al América eliminado. Veremos si el domingo quedan contentos.
