Ciudad de México
El 15 de septiembre de 2016 el señor Matías Almeyda, técnico de Chivas, dijo que el gigante ya había despertado. Exageró. Faltaba todavía. Pero hoy, 22 de febrero de 2017, las cosas han cambiado.
Es una realidad que Chivas vive su mejor momento. Han encontrado una estabilidad que los pone en los primeros puestos de la liga. Chivas está de regreso y eso es bueno para todos, especialmente para la liga.
Mucho se le ha criticado a Jorge Vergara durante estos años. Se ha equivocado en varias decisiones, pero con el cambio de José Manuel de la Torre por Matías Almeyda está claro que acertó. Hace mucho que yo no veía a unas Chivas que creyeran como lo hacen estas.
El mérito de Almeyda, que aún siendo argentino, está haciendo que esos futbolistas tengan amor propio, que tengan el sentido de pertenencia que da el ser mexicano y jugar en Chivas. Eso no lo había logrado nadie.
También tenemos que ser muy claros que esto no servirá de nada si no salen campeones.
La obligación de Chivas, como equipo grande, es ganar títulos y hace mucho no lo hacen. No por eso se tienen que conformar, todo lo contrario. La historia obliga a Chivas a vivir momentos como el que vive, pero también a ganar campeonatos. América se les alejó en el pasado reciente y ahora la misión de Chivas es alcanzarlos.
Ganar los clásicos no es suficiente. Por supuesto que sirve, pero Chivas tiene que salir campeón. Ya despertó el gigante, ya son protagonistas otra vez, pero ahora se necesitan títulos.
Vámonos, que la pasen bien.
Es una realidad que Chivas vive su mejor momento. Han encontrado una estabilidad que los pone en los primeros puestos de la liga. Chivas está de regreso y eso es bueno para todos, especialmente para la liga.
Mucho se le ha criticado a Jorge Vergara durante estos años. Se ha equivocado en varias decisiones, pero con el cambio de José Manuel de la Torre por Matías Almeyda está claro que acertó. Hace mucho que yo no veía a unas Chivas que creyeran como lo hacen estas.
El mérito de Almeyda, que aún siendo argentino, está haciendo que esos futbolistas tengan amor propio, que tengan el sentido de pertenencia que da el ser mexicano y jugar en Chivas. Eso no lo había logrado nadie.
También tenemos que ser muy claros que esto no servirá de nada si no salen campeones.
La obligación de Chivas, como equipo grande, es ganar títulos y hace mucho no lo hacen. No por eso se tienen que conformar, todo lo contrario. La historia obliga a Chivas a vivir momentos como el que vive, pero también a ganar campeonatos. América se les alejó en el pasado reciente y ahora la misión de Chivas es alcanzarlos.
Ganar los clásicos no es suficiente. Por supuesto que sirve, pero Chivas tiene que salir campeón. Ya despertó el gigante, ya son protagonistas otra vez, pero ahora se necesitan títulos.
Vámonos, que la pasen bien.
