La carne sintética se elabora a partir de células madre que son extraídas de músculos animales. Se colocan en un medio de cultivo junto con otros nutrimentos como vitaminas, aminoácidos, grasas y mioglobina (la proteína responsable del color de la carne), y es así como se multiplican hasta formar una estructura similar. Se busca obtener una alternativa lo más parecida a la carne tradicional, tanto en color y textura como en su composición nutricional.
¿Cuáles serían las ventajas de la carne sintética?
Principalmente acabar con el maltrato animal y reducir el daño ambiental, ya que este alimento se podría producir sin emitir gases de efecto invernadero y sin utilizar tanta agua y tierras. Además, el producto sería más rentable, pues no se requeriría gastar tanto en su transporte y almacenamiento.
A pesar de que suena muy atractivo, aún es muy pronto para poder medir el impacto al medio ambiente con exactitud. Falta mucho por avanzar, pues la tecnología aún sigue en desarrollo, sin embargo, es una gran alternativa para el futuro.
Hasta ahora, el único y primer país en aprobar la venta de carne sintética es Singapur, donde se consumen nuggets de pollo elaborados por “agricultura celular”. Hasta que la
FDA la autorice como un nuevo alimento, la carne sintética tendrá que demostrar que es segura para el consumo humano, y esto podría extenderse a nivel mundial.
La pregunta es, tú qué opinas, ¿te animarías a probarla?