Ciudad de México
Cuando queremos bajar de peso, el mango es una de las primeras frutas que nos prohíben. Esto es por la cantidad de azúcares que contiene, sin embargo, también aporta muchos beneficios. Conócelos y aprende a incluirlo en tu dieta, sin engordar.
- Previene los calambres. El mango es muy rico en potasio, por lo que regula la presión sanguínea y el equilibrio de líquidos en el cuerpo.
- Ayuda a cuidar la piel. Contiene una cantidad considerable de vitamina E: protege a nuestro cuerpo de los radicales libres que pueden dañar nuestras células y causar envejecimiento prematuro.
- Fortalece las defensas. Una porción de mango (3/4 de taza), contiene más del 50% de la cantidad de vitamina C que requerimos todos los días. Sabemos que esta vitamina es un antioxidante que se requiere para la formación de colágeno, por lo que, si la consumimos en las cantidades correctas, fortalece nuestros tejidos para que nuestro cuerpo esté más fuerte y pueda enfrentar las infecciones de una mejor manera. Además, es rico en vitamina A y vitamina B6.
- Favorece niveles bajos de colesterol. Esto es gracias a su contenido en pectina, un tipo de fibra soluble que ayuda a reducir los niveles de colesterol malo en la sangre.
¿Cómo incluir mango en mi dieta?
Debido a que es una fruta alta en hidratos de carbono, lo mejor es consumirla:
- Antes de correr: junto con un puño de almendras, o en un pan tostado con crema de cacahuate.
- Después de tu entrenamiento: puede ser en tu batido de proteína. Lograrás una excelente recuperación.
