Las calorías, el azúcar, las grasas…. Comemos lo que nos gusta, o lo que creemos que es saludable, pero ¿revisamos las etiquetas? Bueno pues ahora, aunque no queramos, el etiquetado de los alimentos se ha modificado para informarnos de manera más rápida qué es lo que estamos consumiendo.
¿En qué consiste este cambio?
En marzo de este año, se actualizó la Norma Oficial Mexicana 051, misma que entrará en vigor a partir del próximo 1º de octubre. En ella se estableció cómo debe ser el etiquetado de alimentos y bebidas no alcohólicas (preenvasados), que se hará ahora de manera frontal, destacando el contenido de los nutrimentos más dañinos o críticos para la salud.
Las etiquetas serán más claras y fáciles de entender. Por ejemplo, si un producto es demasiado alto en grasas saturadas, la etiqueta nos lo advertirá para que podamos valorar si lo consumimos o no.
Existen cinco sellos diferentes, de acuerdo a los cinco nutrimentos que, en teoría, nos pueden hacer más daño:
- 1. Exceso de calorías.
- 2. Exceso de azúcares.
- 3. Exceso de grasas saturadas.
- 4. Exceso de grasas trans.
- 5. Exceso de sodio.
Y otros dos sellos que indican: “Contiene cafeína, evitar en niños” y “Contiene edulcorantes, no recomendable en niños”.
¿De verdad será útil?
Las calorías no deben ser lo más importante en nuestra vida. Existen alimentos muy altos en energía y aún así muy saludables, como por ejemplo: una bolsita de cacahuates tostados. Aunque tengan muchas calorías, aportan grasas saludables, que no nos engordan y, al contrario, nos dan saciedad y protegen la salud de nuestro corazón.
En cambio, alimentos bajos en calorías pero muy ricos en azúcares, pueden ser más perjudiciales.
He visto productos muy aceptables para una dieta sana, que etiquetan como: exceso de calorías, exceso de sodio. Y en lugar de ayudar, creo que pueden llegar a causar confusión.
La cuestión es ¿exceso de calorías? Sí pero, ¿para quién? Todos tenemos necesidades y actividades diferentes. Por ejemplo si te tomas una bebida deportiva que es alta en azúcares, durante tu medio maratón, claro que es saludable y necesario para ti.
Si te la tomas viendo la televisión, por supuesto que te engordará. Todo es cuestión de consumir los alimentos en las porciones y momentos adecuados, sin satanizarlos.
La obesidad en México no es problema de los productos ni de sus etiquetas, sino de la educación y alimentación que recibimos en nuestros hogares, así como del sedentarismo.
Nadie nos obliga a comernos esos alimentos, nosotros decidimos si lo hacemos o no.
Empecemos por educar a los pequeños a comer de manera saludable y sin depender del azúcar. Claro, es una simple opinión. ¿Tú qué piensas?