
El Buró de Crédito es una empresa privada que registra los créditos que has tenido y cómo los has pagado.
Estar en este no es malo, pues todos los que han solicitado un préstamo aparecen ahí, lo importante a considerar en esa situación es tu historial de pagos, pues no contar con un buen expediente podría afectarte en el futuro.
Aquí en mediotiempo, te explicamos en qué casos procede que una deuda puede llevar al embargo de tus cuentas o bienes, para que tomes tus precauciones y evites malos momentos.
¿Qué es el Buró de Crédito y cuándo se aplica?
El Buró de Crédito es una sociedad de información autorizada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que genera informes del historial crediticio de una persona o empresa.
En esta se incluye información relacionada con su actividad financiera respecto al crédito, es decir, si es puntual al momento de realizar sus pagos o si comienza a acumular deudas con el crédito.
Por ejemplo, si se quiere obtener una tarjeta de crédito, un préstamo o un crédito hipotecario, el banco pedirá tu reporte al Buró de Crédito para evaluar si cumples con los requisitos necesarios.

¿Cuándo procede un embargo de bienes o de cuentas bancarias?
Esta situación ocurre únicamente cuando existe un proceso legal iniciado por un acreedor cuando hay un incumplimiento de una deuda. Es decir, si una persona no paga, puede recibir una denuncia por una obligación financiera.
Para que esto suceda, deben seguirse varios pasos legales que te presentamos a continuación:
- El acreedor tiene que documentar el incumplimiento de la deuda y presentar la demanda correspondiente.
- Luego de esto, un juez analizará el caso y, si comprueba que el adeudo es legítimo, podría emitir una orden de embargo.
- Finalmente, el deudor será notificado de la situación, permitiéndole buscar una alternativa para resolver la deuda antes de que el embargo se haga efectivo.
Es importante recordar que el Buró de Crédito no tiende a realizar estas acciones directamente pero, el estar registrado con una mala puntuación crediticia puede dificultar futuros préstamos o servicios.
Es recomendable mantener comunicación abierta con los acreedores y buscar soluciones antes de que los casos lleguen a la vía judicial.
