
En México, las transferencias electrónicas realizadas a través del Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI) tendrán un nuevo respaldo oficial: el Comprobante Electrónico de Pago (CEP). Se trata de un documento emitido por el Banco de México que busca brindar mayor seguridad y transparencia a quienes realizan operaciones bancarias. Su implementación marcará un cambio relevante en la forma en que los usuarios validan y comprueban sus movimientos.
El CEP contiene datos clave como el monto transferido, la fecha, la institución emisora y receptora, además de la referencia o clave de rastreo. Con ello, los usuarios podrán verificar que su pago fue instruido correctamente y, en caso de algún problema, contar con evidencia oficial para reclamar ante el banco. Esta herramienta ya está disponible en la página de Banxico y se puede descargar en formatos como PDF o XML ingresando la información correspondiente a la operación.
A partir del 1 de octubre de 2025, el uso del CEP cobrará mayor relevancia con la entrada en vigor del Monto Transaccional de Usuario (MTU), un nuevo requisito que obligará a los bancos a aplicar medidas adicionales de identificación cuando se realicen transferencias superiores a ciertos límites. En este contexto, el comprobante servirá como respaldo fundamental para las instituciones financieras y los clientes.

¿Cómo obtener el CEP en septiembre del 2025?
Para generar el CEP, el usuario deberá ingresar en el portal de Banxico datos como la fecha de operación, banco emisor, banco receptor, monto, número de referencia o clave de rastreo, y la cuenta beneficiaria. Con esta información, el sistema permitirá descargar el documento que acredita la transferencia.
¿Qué ventajas ofrece a los usuarios del CEP?
El principal beneficio del CEP es la seguridad. Reduce riesgos de fraude al contar con un comprobante oficial que no puede ser alterado. También facilita el seguimiento de operaciones en caso de que la transferencia no llegue a destino o se requiera investigar su estatus. Además, se convierte en un medio de verificación confiable para demostrar que un pago fue efectivamente realizado.
Aunque el CEP brinda certeza, no asegura que la transferencia llegue de inmediato. Si existen errores en los datos del beneficiario o rechazo por parte del banco receptor, la operación puede verse afectada. Por ello, es recomendable revisar cuidadosamente la información antes de enviar un pago y conservar siempre el comprobante generado.