Cuando nos mencionan la palabra “dieta”, inmediatamente pensamos en comer poquito y morir de hambre. Sin embargo, el término está mal utilizado.
¿Qué es dieta? Se refiere a la mezcla de alimentos, sólidos y líquidos, que una persona consume a lo largo de todo el día. Nuestras elecciones dependen de la disponibilidad de los alimentos, el costo, así como de nuestra cultura y hábitos alimentarios.
Ahora sí podemos hablar de lo que es una dieta saludable. Este concepto ha evolucionado mucho a lo largo de los años, y se han utilizado distintos modelos para poder explicarlo: pirámides, platos, etc. En mi opinión, el Plato para comer Saludable, creado por expertos en Nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvard, es el más completo y actualizado. Te contaré en qué consiste, para que no te preocupes por andar contando calorías y porciones, y mejor aprendas a equilibrar tus comidas.
- La mayoría de tus comidas deben ser a base de vegetales (la mitad de tu plato). Varía los colores de las frutas y verduras que consumes, pues cada color aporta diferentes vitaminas y minerales y, recuerda, ni la papa ni el elote son verduras.
- Escoge granos integrales (1/4 de tu plato). Tortilla de maíz, pan integral, avena, quinoa y trigo integral. Modera tu consumo de arroz blanco, pan blanco y en general de las harinas refinadas.
- Proteínas (1/4 de tu plato). Proteínas de origen animal como pollo, pescado y carne bajas en grasa, y de origen vegetal como frijoles, habas, lentejas, garbanzos.
- Grasas saludables. Aguacate, almendras, nueces, aceite de oliva, cacahuates. Son alimentos que te dan saciedad y protegen la salud de tu corazón. Puedes incluirlas en cada comida.
- Bebe agua, café o té. Evita las bebidas azucaradas como jugos, aguas de sabor y refrescos. La recomendación es limitar el consumo de leche y productos lácteos a máximo dos porciones al día. Si me preguntan a mí, yo diría: evítalos por completo.
Y tú, ¿qué tan saludable comes? Es momento de revisar tu alimentación.