La pifia de Walmart, en la Ciudad de México, de tener que vender siete pantallas en 2 mil 400 pesos en lugar de 24 mil pesos por un error de etiquetado, no ha sido la única en esta inicio del Buen Fin (y eso que la empresa estadounidense no es parte de este programa de descuentos), según informó la Procuraduría Federal del Consumidor.
La Profeco dio a conocer que dos tiendas de autoservico, una en la Ciudad de México y otra en Durango, se vieron obligadas a vender dos pantallas en un precio muy económico de nueva cuenta por un error en un etiquetado.
En Durando pusieron a la venta una pantalla en 3.30 pesos, ya que se equivocaron al momento de colocar el precio original en la etiqueta que era de 3 mil 300, así que la Profeco intervino para que al consumidor se le vendiera la TV en el valor que indicaba la etiqueta. Lo mismo sucedió en la tienda de la CDMX.
La Profeco ha hecho un llamado a las tiendas de autoservicio para que revisen bien las etiquetas antes de poner al servicio los productos, ya que una vez que éstos salgan a la venta no se podrán retractar del precio ante el consumidor.
