Uno de los principales cuestionamientos que se plantea cuando se habla de las deficiencias que frenan el crecimiento del Futbol Mexicano es la falta de una mayor exportación a ligas europeas del jugador de nuestro país, pero ahora resulta que la tendencia parecería ser repatriarlos.
En los últimos días se ha establecido la posibilidad de que pudieran regresar a clubes de la Liga MX elementos como Jorge Sánchez, tras su paso con poco brillo en el Ajax, o el caso de Erick Gutiérrez, con una actividad menos que regular con el PSV, ambos en la Eredivisie.
Sánchez, quien emigró a los Países Bajos apenas hace un año, estaría de regreso antes de lo que muchos e incluido él pudieran pensar, pero la realidad es que la misma prensa neerlandesa lo catalogó como uno de los peores refuerzos que pudieron llegar en tiempos recientes al conjunto de Ámsterdam, y el cual nunca estuvo a la altura.
Ahora se estima que su futuro podría estar entre Santos Laguna, Rayados de Monterrey o el archirrival de ciudad, los Tigres, de Robert Dante Siboldi, clubes que se supone habrían entrado en la puja por llevarlo a sus filas para el Apertura 2023, que arranca este fin de semana.
Otro de los casos que hasta cierto punto está dentro de la lógica ante la poca o nula actividad es el de Gutiérrez, quien en muchos momentos ha caído en la desesperación y hasta la frustración, no solo por su dolorosa realidad, sino porque ya nos sabe cómo explicar a sus hijos el que esté relegado.
Las puertas para volver se las estaría abriendo Chivas del Guadalajara. Ha trascendido que ya tuvieron acercamientos con los directivos del PSV para establecer una posible operación, ésta sería, se supone, en venta ya que todavía hay un contrato vigente entre el jugador y el club neerlandés hasta junio de 2025.
Guti y sus asesores también habrían sondeado la posibilidad de buscar una oportunidad en otras ligas europeas, principalmente en Portugal o en España, pero el mismo futbolista tampoco descarta el volver a México, y más si ese camino por tener una mayor regularidad se la ofrece el Rebaño.
Para que esta operación avance debe existir una amplia disposición de todas las partes involucradas. Los neerlandeses estarían abiertos a negociar partiendo de una venta de alrededor de 5 millones de dólares, cantidad que tendría que pensar la gente de Chivas si la paga o puja por una cifra menor y que el jugador también esté dispuesto a negociar un salario aceptable para el cuadro tapatío.
Este tipo de operaciones o decisiones que toman los jugadores o sus representantes por abortar la posibilidad de buscar otras opciones en el Viejo Continente, contrastan con la postura que suelen asumir cuando insistían en ir a Europa para triunfar, y ahora resulta que prefieren dar un paso hacia atrás en sus aspiraciones de gloria internacional.