Esta columna la estoy escribiendo sin que todavía hayan hecho oficial lo que es inminente que hoy se hará oficial (juego de palabras a propósito).
¡No tenían ninguna necesidad, ninguna! Sólo le están dando en la madre a algo que pertenecía a la historia de este equipo; llegaron para destruir algo que estaba ahí, en la vitrina de la historia y que no había motivo alguno de romperla.
La pésima decisión de romper con 43 años de retiro del número “7” de Gerónimo Barbadillo de parte de esta directiva, es un indicativo de que les importa poco algo sagrado que se tenía en la historia.
Dirán muchos que estoy exagerando, que no pasa nada, pero tampoco pasaba nada si dejaban ese “7” sin usarlo. No tenían ninguna necesidad: ¡Se equivocaron!
Contexto para la gente que no sabe de lo que hablo: Los Tigres de la UANL, tras quedar campeones en 1982 ante el Atlante, decidieron retirar el número “7” en honor a su más grande jugador que tenían en su corta historia: Barbadillo, quien en 6 años que tenía en el equipo ya había quedado campeón de Liga 2 veces, más uno de Copa.
Aquel 6 de junio de 1982, el famoso “Patrulla” se quedó a jugar la Liguilla y la Final, siendo que la Selección de Perú lo solicitaba previo a la Copa del Mundo de España 82.
Los números se ganan en la cancha.
— Alberto Sandoval (@elcompitv) July 18, 2025
Y hace 43 años este tigre se ganó su “7”.
Barbadillo tenia clase, velocidad, gambeta y gol.
No por nada se fue a Europa a jugar con Avellino, Udinese y Sanvitese.
Hizo 61 goles, ganó 2 Ligas, una Copa pero sobre todo el cariño de la afición. pic.twitter.com/qzyPsY3uCq
Justo 43 años después de que NADIE —en honor y respeto al peruano— usó ese número en Liga (llamada Primera División antes), ahora a alguien se le ocurrió la “brillante” e “inteligente” idea de sacar del retiro ese “7” legendario para dárselo a Ángel Correa, que ninguna culpa tiene en esta polémica.
Dirán los defensores de esta decisión: “La vida evoluciona y vienen cambios”, y ok, entonces ahora cámbienle el nombre de Tigres a “Elefantes”, “Osos” o “Capibaras”, ahora que está de moda este ser vivo de la naturaleza.
Total, el argumento de muchos es que esto evoluciona y que son momentos de cambios en este 2025. Pues denle, jueguen en Apodaca y quiten también los colores azul y amarillo.
Respóndanme esto los defensores de este insulto de decisión:
- ¿Pasaba algo si seguían dejando en retiro el “7”?
- ¿Estaban obligados a hacerlo?
- ¿Ya estaban saturados del 1 al 500 los números en el equipo que SÓLO quedaba el “7” y ningún otro?
- O sea, ¿o era el “7” o no venía Correa?
Todas las respuestas son un rotundo “No”. ¿Entonces?, ¿por qué lo hacen?
No quiero pensar ni afirmar que a esta directiva —por no ser de Monterrey— le vale un comino la historia de este equipo.
“Relájate, Barbadillo no es toda la historia”, dirán los nuevos Tigres que sólo conocen al equipo del 2010 para acá. Y no, es verdad, Gerónimo y su “7” no es toda la historia de este gran equipo, no, pero sí es parte de ella.
¿¡Qué necesidad tenían de hacerlo!? ¿Quién se los aconsejó o a quién demonios se le ocurrió esto que ha dividido al propio equipo y a su afición?
Le pregunté ayer por la tarde a mi Judas de la Oficina del Uni:
¿Por qué lo hacen?, ¿quién tomó la decisión?, y esto me contestó:
“Tiene dividido hasta al propio equipo y a gente de la Uni (UANL). Veo que también la afición y los medios tienen opiniones diversas.“No sé exactamente de quién nació, pero creo que nos estamos equivocando”.
¡No más palabras, señor juez!
Quién piense distinto, quien afirme que está bien la decisión, se respeta. Cada quien su punto de vista.
Cuéntame en redes qué opinas de todo esto. Te leo y te contestaré.
Posdata
¡Perdónalos, Gerónimo… no saben lo que hacen!
Hasta el lunes.
